Claudia Torres/ Mujeres y la Sexta

El 1 de enero pasado celebramos el 30 aniversario del alzamiento del Ejército Zapatista de Liberación Nacional y también el arranque de los 120 años en los que 7 generaciones descenderán de la niña Dení. El zapatismo tiene la tarea de garantizar la libertad de esa niña del futuro y que ella sea capaz de tomar decisiones de manera responsable y comprometida. Que así sea.

Ese horizonte a futuro fortalece aún más la admirable identidad zapatista.

¡Que viva el EZLN!


Fuimos invitados a esta memorable celebración en el comunicado emitido entre noviembre y diciembre de 2023 que constó de 20 partes.  Y a pesar de la advertencia de que esta vez no era seguro viajar por los caminos de Chiapas, más de mil tomamos los riesgos para asistir a la histórica conmemoración de 40 años de la fundación del EZLN, 30 del inicio de la guerra contra el olvido y 20 de la fundación de los Caracoles Zapatistas: 40-30-20.

Fue apabullante la contundencia de los frutos de la Autonomía: un territorio recuperado hace 30 años, convertido en 2020 en el Caracol Zapatista VIII llamado “Resistencia y Rebeldía: Un Nuevo Horizonte” en el pueblo  “Dolores Hidalgo”, ahora sede de la Asamblea de Colectivos de Gobiernos Autónomos Zapatistas de reciente creación, donde fuimos testig@s de la formidable organización a cargo de mujeres y hombres de muchas generaciones, integrantes de pueblos tzeltales, tzotziles, tojolabales, choles, mames; provenientes de la selva, del bosque, de los altos, de la costa; que lograron recibir a miles de visitantes de las zonas cercanas, del Estado de Chiapas, de la región, de México, de Abya Yala, de La Europa Insumisa y del cercano y medio oriente.

Había presencia de más de un centenar de Delegad@s y Concejales de pueblos originarios integrantes del Congreso Nacional Indígena (CNI), visitantes de 30 países y territorios en tres continentes; artistas, intelectuales, periodistas, cineastas, individu@s, familias con niñ@s, jóvenes y hasta con mascotas que llegaron en aventón, taxi, moto, auto, camioneta, autobús, avión.  Con todo y las violencias presentes en Chiapas éramos más de diez mil rebeldes. No deja de sorprendernos la gran capacidad organizativa para lograr estos enormes eventos pero, aún más impresionante y trascendental, es haber logrado la construcción de un mundo basado en la dignidad rebelde y seguir mejorando, perfeccionando sus procesos democráticos y su mirada al futuro sin traicionar su pasado, avanzar en todas las demandas planteadas hace 30 años y basados en “para todos todo”.

Fuimos much@s, muy decididos a estar en territorio zapatista; muy diferentes y tan parecid@s; tod@s en la búsqueda de Otro Mundo posible.  Tuvimos un lugar seguro donde disfrutar los festejos, aprender, relacionarnos con otr@s visitantes y con l@s anfitriones. Pudimos disfrutar y aprender de sus encuentros deportivos llenos de alegría sin competencia feroz; de las obras de teatro en las que desmenuzan la realidad que han logrado transformar en estas décadas de lucha con escenografías muy creativas. Mostraban desde la esclavitud hasta la Autonomía, pasando por la organización y lucha de estas cuatro décadas, caracterizando las formas en las que el sistema capitalista desprecia, despoja, explota y reprime.

Las expresiones artísticas y deportivas fluían por la enorme explanada y sus pasillos.  Hubo mariachis recorriendo el Caracol con sus tradicional música mexicana y l@s invitades se acercaban a escuchar, cantar y hasta zapatear. Todo el día se sucedían grupos musicales alegrando con sus cumbias y por supuesto el baile era muy animado.  Fue un gran deleite de sabores y olores lo que nos ofrecieron en las cocinas comunitarias, el caldo de res con verduras nos revivió después del largo camino de los que viajamos en Caravana desde CDMX, ya que nos vimos obligad@s a tomar largos y sinuosos caminos alternos por los bloqueos de carreteras entre las Ciudades de San Cristóbal de las Casas y Ocosingo.

Nuevas bicicletas y motocicletas lucían impecables flanqueando los pasillos.  De cuando en cuando veíamos pasar al Comando Palomitas, niñas y niños zapatistas, pedaleando velozmente mientras “patrullaban” el Caracol.  Estaban los anunciados unicornios, cocodrilos, dragones, delfines, ballenas y otros seres fantásticos que acompañaban sus juegos y sueños.

Ya por la noche del 31, inició la ceremonia, el acto político, cuando milician@s e insurgent@s presentaron sus marchas y movimientos marciales a ritmo de cumbias y luego de ska. Las mujeres iniciaron y luego se sumaron los hombres, a un punto el Subcomandante Moisés ordenó la formación escudo y quedamos en el centro, muy protegid@s.

Sus rostros estaban iluminados, sus ojos chispeantes de fuerza, vitalidad, alegría. Es muy difícil describir esa vivencia.  Un cúmulo de emociones nos invadieron, es el gusto de estar ahí con todos nuestros compañeras y compañeros zapatistas, con su comandancia, con compas que viajamos en la caravana de tantos países, con los que nos encontramos ahí, en territorio liberado, viendo jóvenes preparados física, mental y políticamente para defender su proyecto de vida: la autonomía.

Entonces inició el discurso a cargo del Subcomandante Insurgente Moisés en el idioma de los originarios de la zona que es Tzeltal, lengua mayense que pudimos escuchar por 19 minutos aproximadamente. Vimos rodar  lágrimas por las mejillas de las jóvenes compañeras bases de apoyo mientras se mencionaban a las y los ausentes,  a madres y padres buscadoras, a desaparecidas y desparecidos, a presas políticas y presos políticos, a asesinadas y asesinados, a jóvenas, jóvenes, niñas y niños asesinados; a tataratarabuel@s; a compañer@s caídos que ya cumplieron su deber. El dolor de la violencia que enturbia a nuestro país nos estremeció de rabia; lo sabemos, pero no nos acostumbramos. Nos queda claro que debemos seguir luchando articulados contra el feroz capitalismo.  Hubo una pregunta en el discurso: “¿Alguien cree que se puede humanizar al capitalismo?  Al unísono vibró una respuesta contundente: NOOO.  “…no va a decir el capitalismo me rindo de explotar. No quieren dejar de engañar, robar y explotar…no se necesita mucho estudio, lo que se necesita es pensar cómo cambiar esto. Somos nosostros, los pueblos, mujeres, hombres… quienes vamos a seguir ese camino y nos vamos a defender.  No necesitamos matar a los soldados ni a los malos gobiernos, pero si vienen, nos vamos a defender. Por eso los hemos hecho a un lado (a los malos gobiernos, al capitalismo) a lo largo de esos 30 años nos bastó para darnos cuenta que la pirámide no sirve (refiriéndose a que no sirve una cúspide que gobierne.)”

Dijo también “la propiedad debe ser del pueblo y en común, y el pueblo tiene que gobernarse a sí mismo.”

La profundidad de estas reflexiones inundó nuestros corazones.

“Organicémonos en cada geografía y cada quien en su calendario.”

“Están comprometidos ahora, compañeros bases de apoyo, estamos solos como hace 30 años, y solos hemos descubierto ese nuevo camino que vamos a seguir: LO COMUN.”

“AQUÍ NOS HACE FALTA TODAVÍA QUE NOS DEMUESTREN SI ESTÁN DE ACUERDO  NUESTROS COMPAÑER@S DEL CONGRESO NACIONAL INDÍGEGA Y EL PUEBLO DE MÉXICO.  COMO AQUÍ ESTAMOS Y AQUÍ VIVIMOS VAMOS A IR VIENDO Y VAMOS A IR CONOCIENDO QUIÉN (está de acuerdo).   ESA ES NUESTRA TAREA, COMPAÑEROS Y COMPAÑERAS ZAPATISTAS, BASES DE APOYO,  A LO LARGO DE ESTOS AÑOS, EL PUEBLO MANDA Y EL GOBIERNO OBEDECE Y LOS MEDIOS DE PRODUCCIÓN SON EN COMÚN Y ES EL PUEBLO EL QUE VA A VER.

A este punto, tuvimos sentimientos colectivos de seguridad, de confianza, de certeza única, de vida, que yo sólo he sentido en territorio zapatista y estando con ell@s.  Hay una maravillosa sensación de triunfo, de logro, de consolidación; y a la vez, hay conciencia de que falta, todavía falta mucho, falta lo que falta.  Especialmente nos falta en otras latitudes donde hay que liberar y descolonizar el pensamiento, luego comprometernos y crear nuevas relaciones sociales y nuevas formas autónomas donde nos organicemos para salvarnos del sistema voraz y de muerte que nos acecha. Y ahí necesitamos estar todas y todos, en armonía, con respeto, sin violencias, sin miedo, en libertad.

Hemos encontrado en cada Caracol lugares excepcionalmente libres y llenos de paz.  Es una paradoja, ya que el sistema apunta toda su fuerza represora sobre el proceso autonómico que se practica y se supera a si mismo, en base a la autocrítica y la crítica.

Quedaremos muy atent@s a la posibilidad de regresar a esos territorios liberados a aprender a trabajar la tierra para obtener en forma digna y colectiva el alimento que nos nutra el cuerpo y el espíritu de lucha, sin explotar a otr@s ni a nuestra MadreTierra y su entorno.

Nos llevamos tejida en los corazones la idea de trabajar desde LO COMÚN y la NO PROPIEDAD.  Trataremos de ser buenos aprendices, lo que no es fácil,  pero ya tenemos en el imaginario colectivo los primeros pasos, que son los primordiales para iniciar esta transformación del pensamiento que nos llevará a transformar las relaciones sociales que, a su vez, nos conduzcan a sentar las bases de Otro Mundo Posible, mientras el sistema capitalista y de muerte sigue desmoronándose peligrosamente sobre la Humanidad.

NUEVA ESTRUCTURA DEL GOBIERNO ZAPATISTA

Gobierno Autónomo Local

Colectivo de Gobiernos Autónomos Zapatistas

Asamblea de Colectivo de Gobiernos Autónomos Zapatistas

Esta estructura suple a los municipios autónomos rebeldes zapatistas (MAREZ) y  a las Juntas de Buen Gobierno (JBG).

Los Caracoles Zapatistas continúan existiendo, siendo la base territorial donde tienen asiento las Asambleas de Colectivos de los Gobiernos Autónomos Zapatistas.

 

Ver el comunicado del EZLN en https://enlacezapatista.ezln.org.mx

Audios y videos de la celebración y del discurso del Subcomendante Insurgente Moisés en

https://radiozapatista.org/?p=47182