Conversación con Lisa Henrito (Primera parte)

La Capitana de la comunidad de Maurak, del pueblo Pemón en lo que hoy se llama Venezuela, nos habla desde su experiencia sobre la importancia del liderazgo para la protección del territorio y el fortalecimiento de la organización.

La autonomía que ejercemos como pueblo Pemón es el empoderamiento de nuestros espacios. Conociendo los avances en materia indígena que tiene la constitución de Venezuela, hemos querido que no quede solo como letras muertas, sino ejercer y dar vida a todos nuestros derechos. Así mismo, cumplir con nuestros deberes como ciudadanos y como indígenas de una nación pero sin perder nuestra esencia, sin dejarnos absorber por el sistema que tienen todos los gobiernos.

Lo primero que hicimos fue ejercer nuestro derecho a la jurisdicción especial indígena como pilar fundamental para poder crear una instancia de representación en cuanto a los caciques generales, crear nuestro propio cuerpo de seguridad para manejar no solo los asuntos internos sino también abarcar todo lo que tiene que ver con el pueblo de Santa Elena que es el más cercano a la comunidad.

Claro, nosotros lo hicimos a la fuerza porque tenía que llegar a eso, a la fuerza. Todo lo hemos hecho a la fuerza precisamente por el maltrato. La forma como nos trata el gobierno, la forma como nos tratan terceros, la forma como nos tratan personas no indígenas que llegan a nuestro territorio nos llevó a memorizar bien nuestras leyes, utilizar los artículos que nos conviene aprender de memoria y ejercerlos.

No se trata de decir solamente que somos indígenas.

Vamos a estar claros, somos una cultura milenaria. Nosotros siempre hemos tenido nuestra forma de gobernar y todo eso, pero todo eso fue muy atropellado, muy pisoteado, muy cuestionado; tanto que nosotros mismos perdimos nuestro norte, pues. Estábamos sometidos a situaciones que ya no pasan tanto porque sabemos nuestros derechos.

Hasta cierto nivel podemos decir que todo lo que pasa aquí, en la gran sabana, tiene que ser aprobado por los capitanes. En el caso de Maurak todos quedan asombrados. A pesar de estar en una frontera que colinda con Brasil donde por supuesto la seguridad de la nación es primordial, yo mantengo mi jurisdicción especial indígena sobre el territorio.

Ninguna fuerza armada, sea del ejercito o cuerpo de seguridad puede entrar sin mi autorización y eso lo hemos mantenido. Ellos pueden entrar si yo los convoco o yo los autorizo para entrar. Y no solamente en Maurak, sino todas las comunidades mantienen eso.

Y si van a entrar por algún asunto, para asistir a algún evento, tienen que ir sin armamento. Comenzando por ahí. Todos los demás imagínate, no pueden hacer nada sin nuestro conocimiento.

También ejercemos nuestra competencia extraterritorial. Cualquier cosa que pasa con algún miembro de mi comunidad fuera del territorio también tienen que informarme enseguida. No deben procesar ningún indígena de mi comunidad sin mi conocimiento porque ese proceso va a ser nulo. Independientemente de lo que sea porque no exijo poder decidir ni nada de eso. Lo que exijo es el conocimiento que debo tener sobre un conflicto que incluye a un indígena de mi comunidad.

Nuestra firmeza ha dado mucho que hablar. Tanto que fuimos atacados el 2019.

Está muy mal visto el cuerpo de seguridad indígena porque dicen que somos paramilitares. Por supuesto que, en un buen sentido de la palabra, podría decirse que somos paramilitares porque si el sistema no está funcionando, si la guardia nacional no está haciendo su trabajo, si el ejército no está resguardando la frontera como debe ser, si no están investigando ni ejerciendo las funciones que deberían hacer, si la policía de tránsito no están haciendo las funciones entonces nosotros tenemos la capacidad, tenemos el conocimiento y tenemos todo el derecho propio de también ejercer eso.

Claro, es un debate decir a quién les corresponde pero yo siempre digo que mientras exista un cuerpo corrupto, mientras aquí no hay un estado de derecho nosotros vamos a seguir ejerciendo la jurisdicción especial indígena.

En nuestra forma de gobernanza por supuesto tenemos nuestra estructura que se respeta. Tú no puedes hacer nada sin autorización del capitán, pero tampoco nosotros nos mandamos solos. Yo no puedo estar firmando documentos sola ni nada. Tengo que tener la autorización de las asambleas. Cuando se trata del territorio la máxima autoridad es la asamblea. Ni la capitanía general, ni yo como capitana de la comunidad, puedo tomar las decisiones sola. Nada de eso.

Entonces al tener esa base fuerte los de arriba tienen que hacer lo que nosotros les decimos.

Es todo un conflicto de verdad. El gobierno nunca nos va aceptar todo lo que hemos hecho y lo que estamos haciendo pero está en la ley. Todo lo hemos fundamentado con  la ley y han tenido que aceptar muchas cosas de mala gana, ¿no? y ahorita la parte fuerte que tenemos muy afectada es la cooptación por parte del gobierno y de los partidos políticos, que han estado reclutando, enamorando lideres, afectando así nuestra forma de gobierno.

 

 

¿Cómo se logra mantener el territorio y la organización?

Lo primero es que el líder o la lideresa tiene que estar bien, bien clara. Conocer bien sus derechos. Si un país no tiene o no esta avanzado en materia indígena entonces hay que fundamentarse en los derechos internacionales que favorecen a los pueblos indígenas

Por experiencia propia te digo que es muy importante que el líder tenga el conocimiento jurídico, cultural, social, político para poder dirigir su pueblo. Tú tienes que saber cuándo negociar con el gobierno y cuando no. Porque esto no es estar solo en contra todo el tiempo.

En segundo lugar, además de su formación, el líder tiene que tener la capacidad de convencer a los miembros de las comunidades de que si no logramos las cosas de manera pacífica, y ojo no quiero que malinterpreten esto, si no estamos capaces de lograr los objetivos pacíficamente, o a través de las leyes y la justicia, hay que utilizar la fuerza que es el derecho a la protesta.

Yo diría que hasta el momento nuestras protestas han sido bastante pacificas porque en 25 años que tengo participando con el pueblo pemón en ningún momento hemos asesinado a nadie. No hay ningún militar muerto, no hay ninguna tercera persona muerta, no hemos matado a nadie. De verdad.

¿Que sí lo hemos tenido que detener y aplicarle todos nuestros castigos indígenas que conocemos? Sí.

En el mundo no indígena puede considerarse, por supuesto, una violación a sus derechos humanos pero el derecho humano de un individuo que está haciendo mal a todo un colectivo no puede estar por encima del bienestar ni los derechos humanos de un pueblo, de un colectivo.

Porque nosotros los indígenas somos muy obedientes. Y eso lo tienen que saber, porque nunca han cuestionado realmente porque el pueblo pemón ha reaccionado como ha reaccionado.

El gobierno nunca pregunta. Solo es una represalia. Que están bravos, que están protestando, que están trancando la vía, que hay que matarlos. Es lo que hicieron el 2019.

Mira. Si a nosotros nos dicen en esta área no pueden trabajar la mina. Eso se respeta. Entran los militares y dicen: “aquí no pasa nadie, aquí no pueden trabajar.” Ok, el indígena sale. “No voy a seguir trabajando, recojo todo, porque no puedo trabajar. Claro que sí.  Es mi territorio tengo que respetarlo, tengo que proteger mi territorio. Yo lo voy a hacer.” El indígena se recoge.

Pero un mes después, van de casería o van al conuco, o están caminando en la selva donde estaban trabajando y se encuentran a esos mismos militares que les dijeron que no podían trabajar ahí explotando esa mina ellos mismos. ¿Qué harías tú si fueras indígena?

Entonces allí vienen las reacciones y todo lo que ha pasado hasta este momento.

Es lo que pasó con el tendido eléctrico. Yo me acuerdo que estaba prohibido tumbar una mata. Toda Imataca, la reserva de Imataca, toda esa parte hacia la gran sabana, prohibido. Incluso se los llevaban presos, decomisaban motosierras a los indígenas que estaban tumbando conucos. Una vez un tío mío fue preso por tumbar una mata de moriche.

Pero luego viene una gran empresa, sin hablar con el pueblo indígena y empiezan a tumbar todos los árboles desde Tumeremo para acá, toda la sierra de Imataca, unas tremendas selvas porque hay un proyecto grande. Dijimos no. Eso no es así. Entonces hay que protestar.

El pueblo pemón es muy radical en esa parte, de verdad.

Si el líder no está claro o la lideresa no está clara en cuál es el objetivo de la protesta, la estrategia que va a emplear y no lleva todo así: primero el dialogo, tres veces dialogo, y luego toma acciones progresivamente y en conjunto con el pueblo no se puede lograr, no hubiésemos logrado lo que tenemos hoy.

De igual manera están haciendo con las minas. Los que están trabajando minas ahora porque han sido incitados. Los militares les dicen trabaja la mina yo te doy el combustible, yo te doy todo lo demás, pero usted trabaja y me paga tanto. Y si el líder no esta claro en su deber de defender el territorio, el se va a vender por tres lonchas y eso es lo que esta pasando en este momento.

 

La madurez política.

 

Eso es muy difícil en muchos pueblos indígenas por eso tienen problemas. Cuando a mí el gobierno nacional me acusó de secesionismo yo estaba en una batalla campal con todos los lideres masculinos de mi pueblo, precisamente porque yo veía todas las cooptaciones que estaban haciendo con ellos y yo estaba muy molesta.

Pero cuando a mí me acusaron públicamente nos unificamos otra vez. Yo me acuerdo que fue una reunión con todos los capitanes y les dije que bueno, aquí vamos a olvidar todos nuestros problemas personales porque en este momento me están atacando a mi pero esta perjudicando a todo el pueblo. Vamos a sacar a mi figura pero tenemos que responder como colectivo, como consejo de caciques, como capitanes, y eso fue lo que hicimos.

Ahí todo el mundo se unifico y sacamos una declaración y todo el mundo se abocó a protegerme. Así yo les caiga mal, así yo les haya ofendido, así no les guste la forma como yo gobierno, así no les guste la forma en que yo manejo un conflicto pero nos unificamos

Y si tú no tienes esa madurez política en un pueblo, nunca van a llegar a lo que tenemos hoy, con todos los problemas, tenemos un territorio que todavía podemos proteger aquí y todavía tenemos que podemos pararnos frente a cualquier gobierno y ya va.

 

La experiencia de los ancianos

Los ancianos muchas veces tienen que ver, acompañar a los lideres. Por ejemplo, cuando se están cometiendo errores.

Por ejemplo, hay muchos lideres que tienen altos cargos dentro de nuestro gobierno indígena, y que son muy rodillas en tierra a este gobierno.

Los hemos llamado, los ancianos los han llamado y les dijeron: “Mira tú en lo personal puedes tener los gustos que quieras, puedes estar a favor de quien quieras, pero no puedes ir a actividades político partidistas siendo capitán. Si no, vas a perder respeto y esto y esto.” Ósea hablaron con ellos.

La mayoría ha hecho caso y los que no han hecho caso, los han sacado y no hay nada peor. A veces decimos que es preferible caer preso a que te ignore totalmente tu pueblo después de haber sido líder. Te ignoran completamente, es como un rechazo del pueblo.

Te lo digo porque me ha pasado. Porque yo no me quedo callada, porque soy conflictiva, porque crecí en ese activismo de la calle. Y eso me ha costado y a mi me han sentado y me dijeron: “Mira Lisa, tú no puedes seguir siendo así. Eres una mujer preparada, fuiste a una universidad, hablas varios idiomas, eres inteligente, sabes hacer proyectos, conoces bien las leyes.” Me dijeron los viejos. “Esto ya no lo debes hacer, la de pelear en la calle eso ya pasó. Ya estas formada, tu tienes la capacidad y nos tienes a nosotros que te apoyamos para que te pares frente a quien sea con las leyes y pelear. Tus flechas, tus piedras, tus balas es la LOPSI , la Ley Orgánica de los pueblos y Comunidades Indígenas, es la Constitución, la 169 de la OIT, etc.”

Me llamaron la atención y eso dependía de mí. Podría pelear y decir que ustedes viejos no saben. He tenido que bajar la cabeza y tienen razón aunque me cueste en el alma. Pero si yo quiero o estoy en esta vida de liderazgo y todo eso, tengo que saber bajar la cabeza cuando me llaman la atención los ancianos.

Eso es lo que hacemos aquí. Claro que no todos hacen caso, pero los que no hacen caso poco a poco van perdiendo espacio.

Así es como nosotros manejamos el escarnio público. Es muy doloroso para nosotros y nuestros ancianos saben eso.

Autonomía

 

Fíjense. Nadie nos debe obligar a nada. Nosotros tenemos que elevar un lineamiento desde aquí, desde el territorio. No podemos seguir los lineamientos de allá cuando nos hace más daño que bien.

Durante la pandemia dijeron que había que estar todo online, yo no estoy de acuerdo.

Nosotros estamos cerca del pueblo y sin embargo yo dije no. Aquí sabemos no tiene que necesariamente ser online

Aquí en Maurak nosotros seguimos con las clases en el conuco, en el balneario, limpiando la comunidad. Se siguió y los padres en sus casas.

Hay algo muy importante aquí. Por eso vuelvo a decir que si el líder no está claro no se puede

No sé cómo explicarlo bien. Ósea, tú tienes que estar en la realidad

Yo soy una persona que nací en otro país, que no era el país de mis ancestros. Me eduque en otro país que tampoco era de mis ancestros pero mis padres me mantuvieron con los pies en la tierra. Yo era indígena. Soy indígena. Tengo que estudiar para ayudar a mi gente. Esto es lo bueno, esto es lo malo.

Papa siempre me decía, tú tienes que hablar varios idiomas porque lamentablemente hay dos idiomas que dominan el mundo. Entonces tienes que aprender bien el inglés y también el español porque cuando viajes todo estará escrito y si no sabes leer y escribir te vas a perder.

Entonces yo le decía, porque yo voy a viajar, para que yo voy a ir tan lejos si no es necesario. Ese era el debate desde muy pequeña con mi padre.

Y después ahora sí, de adulta, yo entendí muchas cosas que papa quiso decirme y yo estoy muy agradecida que el me enseño. Me decía: “Pero eso sí. No vas a ir nomás a salir de tu territorio. Puedes ir, viajar, aprender cosas pero regresas a apoyar a tu comunidad. Vas a estudiar y trabajar para tu comunidad.”

Entonces, si los adultos no están claros no se puede. Porque yo he escuchado, y es una pelea que tengo aquí en Maurak, cuando escucho a los adultos diciendo a sus hijos “vayan a la escuela si no quieren terminar en el conuco (chacra) como yo.”

¡Ya va! ¿Y quién te dijo que estar en el conuco es malo?

Otra cosa es que digan para que no vayas a  la mina, puede ser que yo acepte, porque claro que la mina causa mucha destrucción.

Como líder tu tienes que saber cuales son los cambios que tú vas a permitir.

Yo he sido muy critica en todo. Yo voy a las escuelas y veo en las escuelas, en las carteleras uvas, peras, manzanas.

Y les digo, ¿dónde están las frutas naturales de nuestra comunidad? ¿Las frutas de nuestra selva dónde esta eso?

El niño en cualquier momento, porque vive con una cultura dominante en algún momento va a ver un televisor y va a saber que es una uva, una manzana pero cuándo carajo se va a conocer nuestras frutas, cuándo van a apreciar nuestra cultura.

Yo lo mando a cambiar. Y me dicen ¿Qué hace la capitana que eso es del ministerio de educación? A mí me sabe el ministerio. Ustedes son docentes, tenemos cierta autonomía. La ley dice que todo se hace según los recursos y las costumbres. Claro que hay lineamientos que vamos a seguir pero también ustedes tienen que saber qué es lo que le estamos enseñando a nuestros niños.

Entonces eso depende de nosotros.

Aparte estamos perdiendo territorio también porque hay una crisis fuerte de liderazgo y ahí sí hay que investigar porque yo no sé si nos dejamos alumbrar por todo. No sé que tanta riqueza hay en la otra cultura, no sé. Algo está pasando, por eso estamos perdiendo territorio.

Porque el indígena como vive en su propio entorno. No sabe. Te lo digo hay pueblos indígenas que no saben lo que esta pasando en Gaza. No saben que los israelitas están matando a la gente en gaza. No saben. Pero ellos tampoco tienen porque saberlo, ellos están viviendo en su propia realidad

Entonces depende del líder si lo abre o qué sé yo. Saber como manejar esa información. No es tenerlos sometidos, pero proteger esa forma de vida.

La iglesia ni se diga. Hay que saber qué es lo que tú adaptas de la iglesia y qué no. Porque de eso trata las culturas. No hay cultura ni mejor ni peor. Solo somos diferentes pero el cambio debe ir desde adentro.

El cambio tendrá que ser muy interno y tendrá que ser justificado porque no voy a decir que sí a algo que no es mi cultura. Eso tiene mucho que ver con el liderazgo también.

Ese es el mojón que tienen en la cabeza, que la otra cultura es mejor que la mía. Eso no es así.